El certificado energético se ha convertido en documento esencial para todas las operaciones de alquiler o compra de propiedades en España. Este documento señala las características de eficiencia energética de una vivienda, el cual es un factor determinante en el pago mensual de la factura de luz y gas.
Desde el año 2013 es obligatorio presentar el certificado de eficiencia energética si quieres vender tu casa en cualquier parte de nuestro territorio. Es evidente que este documento se ha convertido en una parte fundamental para fomentar el uso de energías renovables, pero su utilidad va mucho más allá.
Pero más allá de simplemente materializar una transacción, es importante conocer que la rehabilitación energética de una propiedad sirve para revalorizar su precio considerablemente. Evidentemente, la eficiencia eléctrica de una casa es un parámetro muy importante por el gran ahorro que esta puede llegar a proporcionar. Por eso, incorporar el ahorro en gasto energético a la hora de vender una casa o un piso permitirá incrementar el valor general de la misma a corto y mediano plazo.
Conociendo las claves del certificado energético
La calificación energética de viviendas nace con el Real Decreto 235/2013, donde se estipula toda la información necesaria para proceder con la obtención del documento. Primero que nada, es indispensable saber que el responsable de solicitar dicho certificado es únicamente el propietario de la vivienda o de la edificación. Es necesario acudir con un técnico competente para que la información de la eficiencia energética sea incluida de manera objetiva.
En el reporte del técnico se incluye toda la información relacionada con la vivienda: identificación, procedimiento para determinar el nivel de consumo, normativa y características.
Luego de obtener este certificado, el siguiente paso es recibir la etiqueta energética. Esta etiqueta identifica a las propiedades con distintas calificaciones. Por ejemplo, la eficiencia energética A (de color verde) representa la mejor calificación, mientras que la eficiencia energética G (de color rojo) es la peor de todas.
Este documento tiene una validez continua de 10 años. Luego de este periodo, será necesario renovarlo para cumplir con las normativas del momento.
Rehabilitar el consumo energético de tu vivienda te traerá grandes beneficios
El Ministerio de Fomento mencionó que casi el 60% del parque edificado de nuestra nación es anterior a 1980. Es decir, la mayoría de los edificios en España tienen más de 40 años de antigüedad. Toda edificación de más de treinta y cinco años no cuenta con aislamiento térmico, lo cual las hace fundamentalmente obsoletas.
Esto deriva en el consumo energético desmedido que se ha experimentado en el país durante los últimos años. La obsolescencia de las edificaciones ha sido uno de los factores que ha catapultado la implementación de medidas destinadas a proteger el medio ambiente. Consumir menos electricidad es bueno para nuestra sociedad, para nuestro planeta y para nuestro bolsillo.
Sabemos que existen muchas tácticas para incrementar el atractivo de una vivienda, como el home staging, por ejemplo. No obstante, la rehabilitación energética permitirá que tu propiedad consuma menos energía y, por lo tanto, tenga una mejor clasificación en el certificado energético.
El certificado energético es cada vez más relevante entre los compradores
Se estima que rehabilitar una casa en cuestiones energéticas puede aumentar su valor hasta en un 25%. Obviamente, dicha rehabilitación requiere un gasto monetario grande por parte del propietario, pero este gasto se convierte en una inversión exitosa que se recupera rápidamente.
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